CURRICULUM VITAE Nº 58883 

ARTÍCULO PUBLICADO: LA ADOPCION INTERNACIONAL. LA INTERVENCION CON EL MENOR.

Servicios Sociales - ONGs: ADOPCION INTERNACIONAL

LA ADOPCION INTERNACIONAL. SU PROCESO Y SUS

FALLAS.

Dentro de la intervención con menores, y más

concreto en la protección de los mismos, la Adopción Internacional es una

medida de protección.

Con esta medida, partimos con ventaja. Quiero

decir, unos padres preparados y ansiosos por proteger a un menor, unos padres

que han tenido que realizar un esfuerzo emocional y económico para que el

proyecto saliera adelante, unos padres supuestamente preparados hacia la

parentalidad, es decir, cumpliríamos con todos los requisitos para que la

medida fuera exitosa.

Estaríamos cubriendo las carencias con las

que el menor previamente partía en su situación de indefensión y desprotección.

Abordaríamos las carencias emocioanles, cubriríamos las carencias sociales, las

carencias educativas y las carencias económicas entre otras.

Siendo así, y partiendo de unos previos tan

ideales la  adopción internacional, es

siempre una medida exitosa. No. Entre un 1’5% y un 2% de los menores adoptados

son reabandonados. Estudios del 2007 a fecha de hoy puede ser quee el número

haya aumentado pues la proporción de adopciones respecto a cuando se hizo el

estudio también a aumentado.

Es en este punto, donde los Trabajadores

Sociales que estamos inmersos en todo el proceso de adopción nos preguntamos

qué falla y qué podemos hacer para paliar esta situación. Par que la adopción

llegue a ser una medida exitosa 100% puesto que partimos de una buena base,

tenemos todos los previos.

Y llegamos a las siguientes conclusiones:

En el proceso de adopción hay tres actores,

dos principales y uno más secundario. Comencemos por el secundario:

Los profesionales:; Los trabajadores sociales

y psicólogos que participamos en todo el proceso de adopción, no tenemos ningún

tipo de conexión entre nosotros. No nos transmitimos información. Esta falta de transmisión de

información nos hace perder oportunidades de ayuda a los padres y por supuesto

al menor. Por lo tanto la propuesta,, la necesidad de la

coordinación entre profesionales, en el caso en que se considerara necesario.

Los segundos actores, los padres.

Hay dificultad para  a asumir la diferencia entre la parentalidad

biológica y la parentalidad adoptiva  Así

mismo, la motivación y este es el punto más importante, la motivación para la

adopción no ha sido lo suficientemente segura y firme como para afrontar una

parentalidad adoptiva, una adopción mal motivada es bastante probable que acabe

con serios problemas en un momento otro del desarrollo del menor. En  muchas ocasiones en los seguimientos de los

menores los padres nos verbalizan que hay ciertos comportamientos del menor que

no entienden, parece que no se acordara de nada, todas estas frases

implican la dificultad por parte de los padres de entender las necesidades que

el menor les está expresando de una u otra manera.

Ante todo ello, nosotros como profesionales

de la adopción consideramos necesario el trabajo con los padres. Es necesario sesiones de

formación más dilatadas en el tiempo y con mayor profundidad en las que se

pueda trabajar con la familia si realmente son conscientes de lo que significa

la parentalidad adoptiva, los retos que esto supone. En cuanto a la fase de llegada del menor, es imprescindible para los

padres tener un apoyo externo que les ayude a resolver de manera in mediata estas

dudas que les hacen plantearse si lo hacen mal o bien, si ciertos

comportamientos son debidos a una causa y otra y necesario también formar a los

futuros papás como tutores de resiliencia de los niños. Como referentes

necesarios para crear niños resilientes que superen la adversidad y sean

capaces de crecer a costa de ella.

Por útlimo y como actor principal de toda la

historia tenemos al menor. Con el menor desgraciadamente NO SE TRABAJA. El menor, el protagonista de toda la historia

en la adopción, está completamente ausente de lo que supone una filiación

adoptiva. Siendo protagonista principal es ajeno a la historia. De tal manera que cuando el menor llega al

país de origen tiene que asumir:

-       - 

Una nueva concepción de familia.

-       - 

Superación de los duelos.

-      -  

Creación de nuevos vínculos con las nuevas figuras de referencia es

decir con su nueva familia

-       

- Atención a las nuevas formas de superar los conflictos.

-       

- Adaptación a una cultura nueva, un idioma nuevo, una sociedad nueva,

un país con sus colores con sus olores nuevos,

-      - 

Adaptación a un ambiente escolar, partiendo de que su concepción de

escuela nada tiene que ver con ésta y eso siempre en el caso de que haya estado

en ella.

-       - 

Vinculación y acoplamiento a la nueva familia. Ya no la creada entre

padres o posibles hermanos, sino primos, tíos, abuelos.

Ante esto consideramos IMPRESCINDIBLE, el

trabajo con el menor. Serían necesario trabajar con el menor,

-       

- La elaboración de los duelos

-       - 

La asimiliación de su historia pasada

-       - 

La convivencia con diferentes etapas en su vida

-       

- El situarse en la nueva realidad en la que vive.

Consideramos esencial el trabajo previo como

trabajo preventivo. La atención que ahora se le presta al menor en la mayoría

de los casos es una atención en el momento de la Crisis, una atención que

necesariamente tiene que ser terapeútica. Esto es lo que pretendemos evitar.

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